jueves, 25 de noviembre de 2010

LA FUTURA GRAN TRIBULACION

LA FUTURA GRAN  TRIBULACIÓN


Se  comprende  comúnmente  por aquellos que  llevan el  nombre del  Señor  Jesús que las  Escrituras   hablan de  un periodo de  inigualable prueba para los  santos de Dios  antes del  fin de la   presente  edad.  Muchos son muy  ejercitados en  cuanto a esta materia, no estando claros en sus pensamientos  en  cuanto a qué personas  sufrirán en ese  tiempo. Algunos  afirman que la  iglesia de Dios  estará  en  la  escena de  conflicto entonces, y que por  tanto los  santos  celestiales  serán los sufrientes   durante  ese  terrible periodo; otros  afirman que la   iglesia de  Dios será removida a la  gloria antes  que ese  día comience, y que sus pruebas  caerán  sobre un grupo de testigos de un orden  diferente.  La  cuestión es  claramente  demasiado grave y cargada con  resultados demasiado serios, como para quedar como una mera materia de  especulación u opinión.  Esto no puede  tratarse  como  un punto de  indiferencia.  El  tiempo  se apresura, y la  oscuridad se profundiza  a nuestro alrededor; cada  creyente  reflexivo cree que  nos estamos acercando al  cumplimiento de todo lo que los profetas   han  dicho. Entonces  la  importancia  de  conocer ciertamente el pensamiento de Dios. Si la  iglesia de Dios  realmente debe pasar a través  del terrible prueba, es  importante  saber  esto, para  poder prepararnos para  esto y no ser  sorprendidos; mientras, si por  otra  parte,  si las  Escrituras que  hablan de la  gran  tribulación realmente  contemplan una  compañía completamente  diferente de  santos, es  bueno estar seguros de ello, para que  nuestros  corazones puedan estar en descanso acerca de  esta  materia.
Todo esto nos proponemos ahora   investigar.  El único estándar es la  palabra de Dios. ¡Qué poderoso contraste existe entre las  siempre  variadas opiniones de los  hombres y la  inspirada palabra de  Dios! por una parte  no  hay  certeza, sino  frecuentemente  angustia y dudas; por la otra, hay un sólido   fundamento para que los pies  se apoyen,   y la  fe  encuentre su  perfecto descanso.  Todas las dudas son allí  removidas, toda  niebla es expulsada; la  certeza  divina  es  conocida y  gozada en el alma.
Primeramente  examinaremos Mt.24. Se admite que  el más importante pasaje que  trata con la  futura gran  tribulación.  Para  tener justos pensamientos en  cuanto a este  capitulo es obtener   real  ayuda  en  cuanto a muchas  otras  porciones de las  Escrituras. El  carácter  general del evangelio de  Mateo debe  tenerse  en mente. No es  en  vano que el  Espíritu de  Dios nos  haya  dado cuatro relatos  diferentes  del Señor  Jesús en Su  andar  y  caminos  aquí abajo.  Cada  evangelista presenta al Señor en  un  aspecto diferente, como debe ser  evidente a  cada   lector. ¿En qué  carácter  Mateo lo presenta a nuestros  corazones? Indudablemente como  Mesías de Israel. Mt.1 lo muestra como  la  verdadera Simiente de Abraham y Heredero de David. El evangelio  como  un  todo es la  prueba de la  cuestión  de si Israel estaba  o  no preparado para  recibirlo. El  resultado lo  conocemos. Él  fue  despreciado  y  rechazado por los   hombres, y aborrecido por Su propia   nación. Posteriormente, en Mt. 16:18, el Señor habla de  la  iglesia_ "sobre esta  roca  edificaré mi  iglesia"_ una nueva obra de  gracia será  cumplida  posterior sobre  el  rechazo  de Él por  Israel. Las  advertencias   abundan en el evangelio de  Mateo. Israel  no  fue dejado en ignorancia  en  cuanto a lo que  ocurriría si el  Mesías  no  fuese  recibido. Una de las  más  solemnes  declaraciones   concernientes a ellos se encuentra  en  Mt.23:37-39, que  precede  inmediatamente el  capitulo ahora bajo  consideración.  Note la  aflicción  de  Su  bendito  corazón  expresándose: "¿Jerusalén,  Jerusalén, que  matas  a los profetas,  y  apedreas  a los que  te son enviados,  ¡cuántas  veces  quise  reunir a tus  hijos, como la  gallina a sus polluelos debajo de sus alas, pero no quisisteis! He  aquí  vuestra  casa  es dejada  desierta. Porque os  digo, que  no me  veréis hasta que  digáis, bendito el que  viene en el nombre del Señor."  Los discípulos  escucharon y  meditaron en todo  esto. Sus mentes  estaban llenas   con el  reino prometido; ellos  firmemente creían que su  maestro era el  largamente  esperado Mesías,  y  esperaban que  Él pronto  estableciese  el  reino en poder  y  gloria. El siguiente, entre  otros pasajes, muestra lo que estaba  en sus  pensamientos: Mt. 20:20-23; Lc. 19:11; 24:21; Hech.1:6.
Ellos   aun no comprendían la  necesidad de la  cruz, aunque el Señor frecuentemente les habló de esto.  Libertad de los  romanos  y  de todos los  otros opresores, seguida por  gloria  en la  tierra,  estaba solamente  en sus  pensamientos.  Pero ellos podrían haber sacado al menos dos  cosas  de la lamentación del Señor por  Jerusalén: primero, que debe haber  un  periodo de  desolación para Israel y el  templo,  a  causa de  su incredulidad; y segundo,  que  habrá una  venida   futura del Bendito,  cuando  Él será  felizmente  bienvenido por la misma  nación que  una vez lo desconoció  y  rechazó.
Sin embargo, pasando por  allí,  ellos  atrajeron la atención del Señor a los  hermosos edificios del   templo,  y  tuvieron como  respuesta. "¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada." (Mt.24:2). Esto es  demasiado  claro para  ser mal  interpretado. De acuerdo a esto  ellos  preguntaron al  Señor las tres preguntas que se encuentran en el v.3. "¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo? "  Diremos  unas  pocas  palabras  sobre la  expresión  "tu  venida." Debe  comprenderse   claramente  que ellos de  ninguna forma  se referían a la  esperanza  celestial de la   iglesia de Dios, la  venida del Señor  Jesús en los aires para  reunir a los suyos. De esto ellos no sabían absolutamente nada. Esto aun  no era  revelado;  realmente,  ellos no sabían nada  acerca de  la  iglesia más  allá de la  breve palabra  revelada en Mt.16. Si hubiésemos podido  hablarles a ellos en ese día  de una redención  cumplida,  un velo roto, de hijos del  Padre, del Espíritu Santo morando en la iglesia  y el  creyente, de unión con  un  Hombre  glorificado en el cielo,  o de traslación al cielo para  pasar la eternidad  con el  Primogénito  en la  casa del  Padre, ellos  no  habrían entendido una  sola palabra. Todos estos son privilegios  ahora  conocidos  y  gozados, siendo la  inalienable porción de  todos  aquellos  que en este periodo creen en el Señor  Jesús. Pero estas  cosas no eran conocidas  a ellos por los discípulos cuando estaban con el Señor  sobre el monte de los  Olivos. Ayudará  grandemente a la  elucidación de  Mt.24 si  todos los pensamientos de la iglesia de  Dios  desaparecen pronto del pensamiento aquí.
Las  preguntas   presentadas por los  discípulos no fueron preguntadas desde  el punto de  vista de la  iglesia. Ellos eran meramente creyentes  judíos que habían  creído en Jesús  como el  Mesías, y que estaban deseosos de  información  concerniente a  Su  reino  terrenal (esto no debe ser mal  comprendido, Aunque los once no formaban parte  de la  iglesia en el tiempo del cual  estamos  hablando, ellos  muy ciertamente  formaron parte de ella  después;  realmente, ellos  fueron sus primeros miembros. Pero  esto no fue  verdadero sino hasta el día de  Pentecostés, cuando el Espíritu Santo descendió del  cielo para formar el un cuerpo). Ellos  de este modo eran  representantes de  una  compañía similar de santos que  se encontrarán en la  tierra en  un  día  posterior.
En este lugar puede ser  bueno comparar el  relato de Lucas de la  notable profecía del Señor. Él fue guiado por el Espíritu de Dios para detenerse  sobre la primera de  estas   tres preguntas, con  la  respuesta del Señor. Entonces  encontramos plena  información concerniente a la  destrucción  de  Jerusalén por los romanos, pero muy pocos  comentarios  concerniente a la  crisis  al  fin de la  edad. Mateo, por  otra parte,  mientras  nombrando todas  estas  cosas,  fue guiado a  detenerse  sobre las  respuestas a la segunda y tercera  preguntas solamente. Aunque no notando esto, muchos intérpretes  han pensado que Mt.24 se refiere a la  destrucción  de Jerusalén, porque el  pasaje  paralelo en  Lucas  se refiere a  eso. Pero este es un  gran error, y se debe  a la  falta de  atención al  uso del Espíritu de los dos  escritores. Aquí podemos observar la importancia de la  inspiración. Arreglos meramente  humanos no pueden  explicar tales   diferencias; pero  cuando  tenemos en mente que el Espíritu Santo tenía  diferentes  objetos en Su  pensamiento al tomar a  estos  vasos  escogidos,  todo es simple  y  claro.
Echemos  una mirada a las  palabras del Señor  en Mt.24. En los  vv.4-14 la posición  general durante la ausencia del Señor se describe brevemente. Sus  siervos deben esperar encontrar pruebas y sufrimientos en su servicio,  pero deben perseverar  hasta el fin. Estas  exhortaciones  son de   valor  para aquellos que sirven al Señor  Jesús  ahora; pero  tendrán su plena  aplicación en las  circunstancias  de los  testigos judíos  en el  tiempo del fin.
Después   tenemos algo más  definitivo. "Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda),
24:16 entonces los que estén en Judea, huyan a los montes" (vv. 15,16). Aquí  tenemos una señal muy  importante. ¿Qué se piensa por  "abominación  desoladora"? "Abominación"  en las Escrituras  es un  título para   un  ídolo. De  este modo leemos "Milcom, la abominación  de los  amonitas,"  y  "Quemos, la abominación de Moab" (1 rey. 11:5-7). Este es, por   tanto, un  ídolo establecido en el lugar santo en Jerusalén. Esto nunca ha ocurrido en el pasado.  Verdad,  el  templo  fue  contaminado por  Antíoco Epifanes (Dn.11.31), pero  esto tuvo lugar mucho antes de la  profecía  del Señor.  El único evento importante en  conexión con  el  templo desde que el Señor  Jesús  habló fue su destrucción por los  ejércitos  romanos  bajo Tito el  año 70 D.C. ; por   tanto la profecía  del Señor  aun  no se  ha  cumplido.
La  explicación es  como  sigue. El  la crisis  final los  judíos  recibirán al  falso Cristo, como se ha mostrado en el artículo anterior. Él respetará  su palabra por  un  tiempo, y parecerá ser  su guardián y  amigo. Pero él  cambiará sus tácticas después, y  en asociación con  el poder de  occidente tratará de  forzar la  idolatría sobre ellos. No solo él mismo se  sentará en el  templo de Dios,   demandando ser divino, sino que  pondrá allí la  imagen de la  bestia romana. Esta creo es la  "abominación desoladora" a la cual el  Señor se  refiere aquí.  Allí  realmente habrán tres  falsos objetos de  adoración  en ese  día_ el dragón, la imagen de la  bestia,  y el anticristo (Apoc. 12:4-15;  2 Tes.2:4).La multitud del  pueblo  judío ciegamente  aceptará  esto. El Señor  advirtió  a esa  mala  generación que el  espíritu inmundo  retornaría con siete  espíritus peores al fin (Mt.12:43-45). El hato de  cerdos  poseído  por los demonios nos provee   un solemne  cuadro de ellos, los  impulsará a  la  destrucción. (Mt. 8:28-34).
Ellos han encendido  su propio fuego al aceptar al falso  Mesías, y se recostarán en aflicción; esto lo  tendrán de la  justa mano de Dios, como lo declara el profeta (Isa. 1:11)
Estos  serán terribles  tiempos para los  que  temerán a  Dios; terribles  persecuciones estallaran en un carácter  más  severo de algo  ya  conocido. El Señor les manda a ellos que  noten las  señales y tomen advertencias. Cuando ellos  vean esta iniquidad en el santuario  en  Jerusalén deberán  huir. Tan urgente es la  materia que "el que está en la azotea no descienda  para tomar algo de su  casa: tampoco el que  esté en el  campo  descienda para tomar su  capa."  (MT.24:17,18). Ellos  deberán huir a  toda prisa a las  montañas.  Toda  esta  instrucción es  claramente  para  personas que estén  viviendo en Judea. Los  lectores de las Escrituras que persisten en  ver la iglesia de  Dios en este  capitulo deben encontrarse  ellos mismos asediados  con dificultades en cada detalle de la profecía. ¿Esla  iglesia de Dios limitada a una tierra para que   tales señales sean de alguna  utilidad? ¿No  se encuentra más bien la  iglesia de Dios en  cada lugar de la tierra? Cuando  percibimos que los piadosos  en Judea están  en  vista,  todo es  simple   y  claro.
El Señor les manda que  oren para que  su  huida no sea  en invierno,  o en  día  sábado. ¡Qué misericordioso es Él! Siempre pensando en las circunstancias de Sus  amados santos, aunque  estas  sean triviales  o pequeñas. ¡Él piensa del sufrimiento envuelto en  una  huida en  invierno sin  tiempo para ir a  casa  buscar una  capa! ¡Y qué dilema para  ellos mismos si la imagen  fue  puesta en el lugar santo un  día  sábado! Por  tanto Él les manda clamar a  Dios para que no ocurra  así. En  tal  caso ellos no sabrían que   hacer, si una jornada de alguna  extensión debiese ser emprendida en  día  sábado (hech.1:12) esto envolvería un quebrantamiento de la ley; aun  así,  si ellos se demoraban un poco  debido a  su  conciencia, podrían perder sus  vidas.
La  introducción  del  sábado es  una  prueba  adicional que  estamos sobre  terreno judío, más bien que cristiano. En ninguna parte en las  epístolas del N. Testamento es referido el  sábado en conexión con la  iglesia de Dios salvo en  Col.2:16,17, donde  el  apóstol contiende por libertad  en  cuanto a  este día.  El día cristiano no es el séptimo día, sino el primero dela semana; que nos habla de  una  redención  consumada,  de victoria   obtenida, y de  una nueva creación donde  todas las  cosas  son de Dios. Es serio  confundir los dos  días,  aunque  comúnmente se   hace.  Los  principios  conectados con ellos  son  completamente diferentes, y aun  opuestos.  El  día  sábado está suspendido durante el presente  periodo de  gracia,  pero  vendrá ala  vista nuevamente ,entonces  Dios reasumirá las  relaciones con  el pueblo de Israel.
Para volver. La tribulación será una sin paralelo. Satanás será  justo entonces  arrojado del  cielo (para nunca más retornar a  este), y estará lleno de ira,  sabiendo que tiene poco  tiempo (Apoc.12:7-13). Toda  oposición a  sus esquemas  él tratará de borrarla por medio de sus principales herramientas, la bestia romana  y el hombre de  pecado. Aun  así  tendrá las  riendas de todo. El  enemigo no puede  exceder sus límites. Él tiene el tiene  establecido  el momento cuando la  aflicción  cesará; pero por  causa de los  escogidos esos  días serán acortados (v.22). Por  tres  años  y  medio la  tribulación  arderá. El periodo es  descrito de  varias maneras  en las  Escrituras, no dejando  ninguna duda en el pensamiento. En Apoc.11:3; 12:6, leemos de "mil doscientos sesenta días;" en Apoc.11:11:2, de  "cuarenta y dos meses;"  y  en  Dn.7:25,  de  "tiempo, tiempos,  y   medio tiempo". También  Dn.9:27  confirma esto.
Antes de   hablar de  libertad, el Señor da  otra  advertencia de un  carácter. "Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis.
24:24 Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.
24:25 Ya os lo he dicho antes. 24:26 Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis. "(vv. 23-26). Esta palabra de consejo sin duda probará  ser  de gran  valor en ese  tiempo. Los fugitivos pueden ser   fácilmente engañados. Cuando  huyendo por sus  vidas, clamando de sus agonizantes  corazones, "oh  Señor, ¿hasta  cuándo? (Sal. 79:5; Isa. 64:1). Qué  fácilmente podrían ellos sea  engañados  por   falsos reportes. Supongamos que  alguno les  dijese  que  Cristo ha llegado,  y que  está en belén o  en alguna  otra   parte, esto podría ser  creído. Existe  una   gran diferencia en la  esperanzas  del cristiano  y del judío en este  respecto. Nuestra  esperanza  no es la venida del Señor a la  tierra, sino a los aires. Allí nos encontraremos con  Él, e iremos  con Él a la  casa del  Padre. Esta es nuestra propia  esperanza; pero para los  judíos es distinto. Él vendrá a ellos  donde ellos  están, Sus pies  primero  tocarán el monte de los Olivos, el mismo  lugar desde donde  subió (Zac. 14:4; Hech. 1:9-12). Pero el punto de  advertencia es que ellos no necesitan ser  informados del momento  cuando  Él aparezca, porque Su manifestación  será un  despliegue público de  gloria, comparable al relámpago que sale del  oriente, y brilla  hasta el  occidente:  "todo  ojo le  verá" (Apoc. 1:7)
Su venida  pondrá  fin a la  gran  tribulación. El justo Señor tratará con Sus  adversarios,  especialmente la   bestia, y el  hombre de  pecado (como ya lo hemos mostrado), y libertará a  Sus oprimidos  y sufrientes  santos. Este es el  testimonio de Mt.24.
Ahora  consideraremos  el  testimonio de los profetas  del A. Testamento. Lea Jer. 30:30:4-9.El profeta evidentemente habla del mismo  tiempo  que el Señor Jesús  en el  capitulo  que hemos estado examinando. "¡Ay! Porque  grande  es  ese día, ninguno semejante  a  este" Este es el claramente  bien conocido tiempo de inigualable tiempo de  tribulación. ¿Pero quienes son  los sufrientes contemplados? No la  iglesia,  dela cual jeremías sabía aun menos que los  discípulos que  se sentaban con el Señor sobre el monte de los Olivos. "Este es el tiempo de angustia para Jacob"  "Estas  son las palabras  que  Jehová  habló concerniente a Israel y  Judá". Todo esto es muy simple e inteligible, salvo para  aquellos que son adictos  al hábito de "espiritualizar" las  profecías del A. Testamento.  Tal modo de  interpretación es  un  gran error, altamente  dañino en muchos  casos para el  alma,  que se encuentra  a si misma  apropiándose  de bendiciones meramente terrenales, cuando Dios quiere que el corazón goce de la  porción celestial,  que Él nos ha dado en Cristo  resucitado.  Cuando  Dios  dice "Israel" y  "Judá",  podemos  estar seguros  que piensa en lo que dice. Entonces,  la predicción de  jeremías habla de tribulación para  el pueblo terrenal, y no hay otros en su pensamiento.  Pero libertad debe seguir, como Mt.24  nos ha mostrado. Jacob será  salvo de su tribulación, el  yugo de los opresores  será roto para siempre,  e Israel servirá a Jehová su Dios, y al verdadero  David su rey.
Volvámonos ahora a  Dn.12:1:" Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravillas, y prosperará, hasta que sea consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá.
11:37 Del Dios de sus padres no hará caso, ni del amor de las mujeres; ni respetará a dios alguno, porque sobre todo se engrandecerá.
11:38 Mas honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio.
11:39 Con un dios ajeno se hará de las fortalezas más inexpugnables, y colmará de honores a los que le reconozcan, y por precio repartirá la tierra.
11:40 Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará.
11:41 Entrará a la tierra gloriosa, y muchas provincias caerán; mas éstas escaparán de su mano: Edom y Moab, y la mayoría de los hijos de Amón.
11:42 Extenderá su mano contra las tierras, y no escapará el país de Egipto.
11:43 Y se apoderará de los tesoros de oro y plata, y de todas las cosas preciosas de Egipto; y los de Libia y de Etiopía le seguirán.
11:44 Pero noticias del oriente y del norte lo atemorizarán, y saldrá con gran ira para destruir y matar a muchos.
11:45 Y plantará las tiendas de su palacio entre los mares y el monte glorioso y santo; mas llegará a su fin, y no tendrá quien le ayude." (Dn. 11:45) Se verá  que el  ángel está hablando al  profeta del  día de la  supremacía  del anticristo en la  tierra   gloriosa (Israel),  con esto está conectado "un tiempo de  tribulación,  tal como nunca lo  ha habido desde que hubo  nación," Este es el periodo   familiar de  la tribulación  sin paralelo. ¿Pero quienes  son los sufrientes? "Tu pueblo:" el pueblo de  Daniel son los  judíos, como no necesito detenerme para probarlo.  La libertad sigue a la  tribulación, al menos para los elegidos_ aquellos  inscritos en el libro de  Dios. Daniel,  y el Señor  Jesús  escribieron en  tiempos  diferentes,  y bajo circunstancias ampliamente  diferentes, ellas corresponden exactamente en cada pequeño detalle. La mente reverente  no puede  fallar en ver en esto la mano  guiadora de  un Espíritu. Él  fue quien  inspiró a  todos los  escritores en el libro de Dios, dando unidad y armonía a todo. Pueda  nuestra confianza en el Espíritu de Dios profundizarse en  este  día malo, cuando tanta incredulidad y duda  existen a nuestro alrededor.
El próximo pasaje  puede  presentar  mayores  dificultades a algunos  lectores de las  Santas  Escrituras; me  refiero  a  Apoc.7:9-17. Allí  leemos  indudablemente de  gentiles ,  lo que  ha guiado a muchos  a suponer  que la  iglesia de Dios  es pensada por ello. Pero atención  al  lugar acordado al cap.7. El libro de  Apocalipsis  ayudará  grandemente  a  resolver  la dificultad. En Apoc.1 vemos siete  candeleros,  y  al Hijo del hombre  andando en medio de ellos; esto es preliminar. En Apoc. 2 y 3, en las  epístolas a las siete  iglesias en Asia, tenemos un  bosquejo  de la historia  exterior dela  iglesia  sobre la tierra desde los  días de los apóstoles  hasta  el  fin.  Después de esto no escuchamos nada más de  iglesias excepto en Apoc.22:16. Apocalipsis   4 y 5, muestra al cielo preparándose para la obra de  juicio, y a los  santos  celestiales bajo la   figura de 24 ancianos coronados y entronizados, que  son  vistos  en  el  hogar con el Señor antes de que los  juicios  comiencen. Esto es  seguido por la  apertura de los  sellos (Apoc.6) y el derramamiento de la  ira   divina.  Después tenemos apoc.7.Este es realmente  un  paréntesis, que   viene  entre los  sellos sexto  y séptimo. Este habla de misericordia en medio del  juicio.  El corazón de  Dios  ama la misericordia. El juicio es Su obra  extraña. Él debe  ejecutarlo en  consistencia  con la  santidad de  Su naturaleza, y en  vista a  mantener la  majestad de  Su  trono, pero Él  no se  deleita en el  juicio.  Él  tiene  real  delicia  en  bendecir y salvar  al  hombre, como lo muestra Lucas,  Él nunca encuentra  delicia  en juzgarlos.
Apoc.7, entonces,  es  un paréntesis de misericordia. Los juicios  son  restringidos, mientras  Dios pone a un lado el  velo, para marcar a  los  Suyos. Primero encontramos a 144.000  sellados. Un   número  definido de  todas  las   tribus de  Israel en vista a ser  preservados durante  los  terrores de los  tiempos.  ¿Pero es  esto  todo? No; también  hay  gentiles  salvados. "Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos; y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén. Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido? Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. "(vv. 9-14)
Algunos  dirán, "¡ciertamente  estos  son la   iglesia de  Dios!" Los  tales  harán bien en  examinar  de  cerca  los  versículos. Observe, esta multitud  vestida d e  blanco con palmas en sus manos es  completamente  distinta a los  ancianos, que, como  ha  hemos notado, representan a la  iglesia,  aunque no solo ala  iglesia. Uno de los  ancianos  presenta la pregunta al apóstol  en  cuanto a esta  incontable multitud, y  después  explica  que ellos  han salido de la  gran tribulación. El  artículo definido debiese  insertarse  en  el  v.14. Esto ayuda a  una mejor  comprensión de las  palabras del  anciano. Estas  evidentemente son  personas  que   han  escuchado el  evangelio del  reino de parte de  mensajeros  judíos y  creído  en éste. Sufrimiento  sigue para ellos, aunque  no  necesariamente  la pérdida de la  vida. Debe  recordarse  que las  seducciones  y tribulaciones de los  últimos  días  serán  muy ampliamente  extendidas.  Aunque  muy severas en Judea,  como es  justo, estas  se extenderán desde  allí  más o menos a  toda la  tierra   civilizada. El   hombre de pecado  en la  tierra,  estará  asociado con el líder del  imperio  romano  reavivado, extenderá su  veneno, con su consecuente  sufrimiento  y  aflicción,  por   todas  partes.
Pero  esta  multitud  vestida de  blanco, por  gracia  ha permanecido  firme.  Como Sadrac, Mesac,  y Abed-nego, ellos se  han negado a unirse a la idolatría   universal. "ellos han lavado sus ropas, y las  han emblanquecido en la  sangre del  Cordero."  Ellos son ahora  vistos  victoriosos, a  punto de entrar en la  bendición. Los  términos de sus  bendiciones  hablan de la  tierra, mas  bien que  del cielo, las  figuras  son tomadas  prestadas de Isa.49, "Ante  el   trono"  es probablemente una  expresión moral mas bien que  local, como  en Apoc. 14:3 (compare  también Apoc.12:1).Su lugar  y porción, no dudo, será en la  tierra  milenial  bajo el  apacible  reino del Señor  Jesús.
Unas pocas  palabras  en  cuanto a  Apoc.12 pueden ser útiles a algunos  lectores. La gran  tribulación no es referida  allí por  nombre, pero la  alusión a   través de todo  es evidentemente a  ese  periodo. La  mujer   vestida con el sol es  vista siendo perseguida por  el  dragón, pero siendo preservada por Dios,  y alimentada en el desierto  durante  los mil doscientos  sesenta  días (Apoc.12:6-14). ¿Quién es la  mujer? El  v.5 es  suficiente para  responder a la pregunta.  El Hijo  varón es Cristo,  esto  está más allá de controversia,  Cristo  vino de Israel, como nos  recuerda el apóstol en  Rom. 9:5. El primer  verso de  nuestro  capitulo nos muestra a  Israel visto desde el punto de  vista  de Dios,  investido con todos los  símbolos de  autoridad  sobre la  tierra. En los días   finales, ella es el objeto de la  enemistad de  Satanás. Él moverá  poderes  contra  ella, y hará  todo lo que  está en su poder para  destruirla. Pero no  tendrá  éxito. Israel  está designado por Dios para  venir a ser supremo  en la tierra;  un  remanente por  tanto  será preservado en misericordia a través de  todos los  horrores de las últimas  escenas  para este  mismo  fin. Su palabra para  Sus probados será, "Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación." (Isa. 26:20). Él proveerá para ellos  una  Zoar,  como lo  hizo para  Lot en  días  pasados (Gén.19)
Tenemos que  considerar  una  escritura  más_ Apoc. 3:10: "Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra."
Esta  palabra es  indudablemente  para la iglesia. Esto es parte de las palabras del Señor a la  iglesia  en  Filadelfia. ¡Pero qué diferente  al lenguaje  de este  pasaje a los que  hemos  estado  considerando! Aquí no encontramos  consejos en  cuanto a lo que  hay que hacer en tiempos de  prueba,  tampoco  alguna promesa de gracia preservadora,  sino simplemente, "te guardaré de la  hora."  Existe  ciertamente  una  vasta   diferencia  entre ser  preservado a través de  la  tribulación, y ser mantenido aparte de  ésta completamente.  Enoc  y Noé  naturalmente vienen a  nuestros pensamientos  aquí.  A uno se le  habló del juicio  venidero, pero él  fue trasladado al cielo antes de que  el juicio  cayese; el otro de  igual manera   fue  advertido de la  ira  venidera, pero, en lugar  de ser quitado de la  escena de  juicio, fue preservado a través de ella en un  refugio provisto para  él y su  familia por Dios.  Enoc  es un tipo de la   iglesia de Dios, Noé es mas  bien   una  figura del  remanente piadoso de  Israel.
"La hora  de tentación (o prueba)"  es  un  término  más amplio  para referirse a la  "gran  tribulación". La última, como  hemos  visto, solo es de  tres  años  y medio de  duración, y comienza  a la  mitad de la semana  setenta de  Daniel,  cuando el  falso  Cristo cambie su  actitud  y demande para si adoración; la "hora de  tentación" comienza cuando él aparece primeramente, y  cubre, por  tanto, toda la última semana profética,  y posiblemente  más. De  todo esto la  iglesia de  Dios debe ser  preservada. Nosotros  esperamos  la  Estrella  resplandeciente de la  mañana. Antes de que los  juicios de Dios  desciendan, seremos  quitados de esta mala escena, y estaremos seguros con  Cristo en la casa del Padre  arriba.
Mientras  tanto Su palabra es para  nosotros la palabra de  Su  paciencia. Él espera a la  diestra  del Padre  arriba, y nosotros esperamos en el  lugar de  conflicto abajo, por ese mismo maravilloso  evento, por el mismo  bendito  momento de  gozo. ¡Pueda  esto ser  crecientemente  una   realidad para   cada uno de  nosotros, por  causa de  Su nombre!
"¡Cordero de  Dios Tú pronto en  gloria!
A  esta  triste   tierra retornarás;
Todos  tus enemigos temblarán  ante  Ti,
Todos los que  ahora  te  desprecian se lamentarán.
Todos  Tus  santos entonces  estarán  contigo,
Contigo en  Tu  reino para  reinar;
Tuya  la  alabanza,  y  Tuya la   gloria,
¡Cordero de  Dios, muerto por los pecadores!
  
                                                                 
                                                                                                                W.W. FEREDAY
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