LA FUTURA GRAN TRIBULACIÓN
Se comprende comúnmente por aquellos que llevan el nombre del Señor Jesús que las Escrituras hablan de un periodo de inigualable prueba para los santos de Dios antes del fin de la presente edad. Muchos son muy ejercitados en cuanto a esta materia, no estando claros en sus pensamientos en cuanto a qué personas sufrirán en ese tiempo. Algunos afirman que la iglesia de Dios estará en la escena de conflicto entonces, y que por tanto los santos celestiales serán los sufrientes durante ese terrible periodo; otros afirman que la iglesia de Dios será removida a la gloria antes que ese día comience, y que sus pruebas caerán sobre un grupo de testigos de un orden diferente. La cuestión es claramente demasiado grave y cargada con resultados demasiado serios, como para quedar como una mera materia de especulación u opinión. Esto no puede tratarse como un punto de indiferencia. El tiempo se apresura, y la oscuridad se profundiza a nuestro alrededor; cada creyente reflexivo cree que nos estamos acercando al cumplimiento de todo lo que los profetas han dicho. Entonces la importancia de conocer ciertamente el pensamiento de Dios. Si la iglesia de Dios realmente debe pasar a través del terrible prueba, es importante saber esto, para poder prepararnos para esto y no ser sorprendidos; mientras, si por otra parte, si las Escrituras que hablan de la gran tribulación realmente contemplan una compañía completamente diferente de santos, es bueno estar seguros de ello, para que nuestros corazones puedan estar en descanso acerca de esta materia.
Todo esto nos proponemos ahora investigar. El único estándar es la palabra de Dios. ¡Qué poderoso contraste existe entre las siempre variadas opiniones de los hombres y la inspirada palabra de Dios! por una parte no hay certeza, sino frecuentemente angustia y dudas; por la otra, hay un sólido fundamento para que los pies se apoyen, y la fe encuentre su perfecto descanso. Todas las dudas son allí removidas, toda niebla es expulsada; la certeza divina es conocida y gozada en el alma.
Primeramente examinaremos Mt.24. Se admite que el más importante pasaje que trata con la futura gran tribulación. Para tener justos pensamientos en cuanto a este capitulo es obtener real ayuda en cuanto a muchas otras porciones de las Escrituras. El carácter general del evangelio de Mateo debe tenerse en mente. No es en vano que el Espíritu de Dios nos haya dado cuatro relatos diferentes del Señor Jesús en Su andar y caminos aquí abajo. Cada evangelista presenta al Señor en un aspecto diferente, como debe ser evidente a cada lector. ¿En qué carácter Mateo lo presenta a nuestros corazones? Indudablemente como Mesías de Israel. Mt.1 lo muestra como la verdadera Simiente de Abraham y Heredero de David. El evangelio como un todo es la prueba de la cuestión de si Israel estaba o no preparado para recibirlo. El resultado lo conocemos. Él fue despreciado y rechazado por los hombres, y aborrecido por Su propia nación. Posteriormente, en Mt. 16:18, el Señor habla de la iglesia_ "sobre esta roca edificaré mi iglesia"_ una nueva obra de gracia será cumplida posterior sobre el rechazo de Él por Israel. Las advertencias abundan en el evangelio de Mateo. Israel no fue dejado en ignorancia en cuanto a lo que ocurriría si el Mesías no fuese recibido. Una de las más solemnes declaraciones concernientes a ellos se encuentra en Mt.23:37-39, que precede inmediatamente el capitulo ahora bajo consideración. Note la aflicción de Su bendito corazón expresándose: "¿Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados, ¡cuántas veces quise reunir a tus hijos, como la gallina a sus polluelos debajo de sus alas, pero no quisisteis! He aquí vuestra casa es dejada desierta. Porque os digo, que no me veréis hasta que digáis, bendito el que viene en el nombre del Señor." Los discípulos escucharon y meditaron en todo esto. Sus mentes estaban llenas con el reino prometido; ellos firmemente creían que su maestro era el largamente esperado Mesías, y esperaban que Él pronto estableciese el reino en poder y gloria. El siguiente, entre otros pasajes, muestra lo que estaba en sus pensamientos: Mt. 20:20-23; Lc. 19:11; 24:21; Hech.1:6.
Ellos aun no comprendían la necesidad de la cruz, aunque el Señor frecuentemente les habló de esto. Libertad de los romanos y de todos los otros opresores, seguida por gloria en la tierra, estaba solamente en sus pensamientos. Pero ellos podrían haber sacado al menos dos cosas de la lamentación del Señor por Jerusalén: primero, que debe haber un periodo de desolación para Israel y el templo, a causa de su incredulidad; y segundo, que habrá una venida futura del Bendito, cuando Él será felizmente bienvenido por la misma nación que una vez lo desconoció y rechazó.
Sin embargo, pasando por allí, ellos atrajeron la atención del Señor a los hermosos edificios del templo, y tuvieron como respuesta. "¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada." (Mt.24:2). Esto es demasiado claro para ser mal interpretado. De acuerdo a esto ellos preguntaron al Señor las tres preguntas que se encuentran en el v.3. "¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo? " Diremos unas pocas palabras sobre la expresión "tu venida." Debe comprenderse claramente que ellos de ninguna forma se referían a la esperanza celestial de la iglesia de Dios, la venida del Señor Jesús en los aires para reunir a los suyos. De esto ellos no sabían absolutamente nada. Esto aun no era revelado; realmente, ellos no sabían nada acerca de la iglesia más allá de la breve palabra revelada en Mt.16. Si hubiésemos podido hablarles a ellos en ese día de una redención cumplida, un velo roto, de hijos del Padre, del Espíritu Santo morando en la iglesia y el creyente, de unión con un Hombre glorificado en el cielo, o de traslación al cielo para pasar la eternidad con el Primogénito en la casa del Padre, ellos no habrían entendido una sola palabra. Todos estos son privilegios ahora conocidos y gozados, siendo la inalienable porción de todos aquellos que en este periodo creen en el Señor Jesús. Pero estas cosas no eran conocidas a ellos por los discípulos cuando estaban con el Señor sobre el monte de los Olivos. Ayudará grandemente a la elucidación de Mt.24 si todos los pensamientos de la iglesia de Dios desaparecen pronto del pensamiento aquí.
Las preguntas presentadas por los discípulos no fueron preguntadas desde el punto de vista de la iglesia. Ellos eran meramente creyentes judíos que habían creído en Jesús como el Mesías, y que estaban deseosos de información concerniente a Su reino terrenal (esto no debe ser mal comprendido, Aunque los once no formaban parte de la iglesia en el tiempo del cual estamos hablando, ellos muy ciertamente formaron parte de ella después; realmente, ellos fueron sus primeros miembros. Pero esto no fue verdadero sino hasta el día de Pentecostés, cuando el Espíritu Santo descendió del cielo para formar el un cuerpo). Ellos de este modo eran representantes de una compañía similar de santos que se encontrarán en la tierra en un día posterior.
En este lugar puede ser bueno comparar el relato de Lucas de la notable profecía del Señor. Él fue guiado por el Espíritu de Dios para detenerse sobre la primera de estas tres preguntas, con la respuesta del Señor. Entonces encontramos plena información concerniente a la destrucción de Jerusalén por los romanos, pero muy pocos comentarios concerniente a la crisis al fin de la edad. Mateo, por otra parte, mientras nombrando todas estas cosas, fue guiado a detenerse sobre las respuestas a la segunda y tercera preguntas solamente. Aunque no notando esto, muchos intérpretes han pensado que Mt.24 se refiere a la destrucción de Jerusalén, porque el pasaje paralelo en Lucas se refiere a eso. Pero este es un gran error, y se debe a la falta de atención al uso del Espíritu de los dos escritores. Aquí podemos observar la importancia de la inspiración. Arreglos meramente humanos no pueden explicar tales diferencias; pero cuando tenemos en mente que el Espíritu Santo tenía diferentes objetos en Su pensamiento al tomar a estos vasos escogidos, todo es simple y claro.
Echemos una mirada a las palabras del Señor en Mt.24. En los vv.4-14 la posición general durante la ausencia del Señor se describe brevemente. Sus siervos deben esperar encontrar pruebas y sufrimientos en su servicio, pero deben perseverar hasta el fin. Estas exhortaciones son de valor para aquellos que sirven al Señor Jesús ahora; pero tendrán su plena aplicación en las circunstancias de los testigos judíos en el tiempo del fin.
Después tenemos algo más definitivo. "Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda),
24:16 entonces los que estén en Judea, huyan a los montes" (vv. 15,16). Aquí tenemos una señal muy importante. ¿Qué se piensa por "abominación desoladora"? "Abominación" en las Escrituras es un título para un ídolo. De este modo leemos "Milcom, la abominación de los amonitas," y "Quemos, la abominación de Moab" (1 rey. 11:5-7). Este es, por tanto, un ídolo establecido en el lugar santo en Jerusalén. Esto nunca ha ocurrido en el pasado. Verdad, el templo fue contaminado por Antíoco Epifanes (Dn.11.31), pero esto tuvo lugar mucho antes de la profecía del Señor. El único evento importante en conexión con el templo desde que el Señor Jesús habló fue su destrucción por los ejércitos romanos bajo Tito el año 70 D.C. ; por tanto la profecía del Señor aun no se ha cumplido.
La explicación es como sigue. El la crisis final los judíos recibirán al falso Cristo, como se ha mostrado en el artículo anterior. Él respetará su palabra por un tiempo, y parecerá ser su guardián y amigo. Pero él cambiará sus tácticas después, y en asociación con el poder de occidente tratará de forzar la idolatría sobre ellos. No solo él mismo se sentará en el templo de Dios, demandando ser divino, sino que pondrá allí la imagen de la bestia romana. Esta creo es la "abominación desoladora" a la cual el Señor se refiere aquí. Allí realmente habrán tres falsos objetos de adoración en ese día_ el dragón, la imagen de la bestia, y el anticristo (Apoc. 12:4-15; 2 Tes.2:4).La multitud del pueblo judío ciegamente aceptará esto. El Señor advirtió a esa mala generación que el espíritu inmundo retornaría con siete espíritus peores al fin (Mt.12:43-45). El hato de cerdos poseído por los demonios nos provee un solemne cuadro de ellos, los impulsará a la destrucción. (Mt. 8:28-34).
Ellos han encendido su propio fuego al aceptar al falso Mesías, y se recostarán en aflicción; esto lo tendrán de la justa mano de Dios, como lo declara el profeta (Isa. 1:11)
Estos serán terribles tiempos para los que temerán a Dios; terribles persecuciones estallaran en un carácter más severo de algo ya conocido. El Señor les manda a ellos que noten las señales y tomen advertencias. Cuando ellos vean esta iniquidad en el santuario en Jerusalén deberán huir. Tan urgente es la materia que "el que está en la azotea no descienda para tomar algo de su casa: tampoco el que esté en el campo descienda para tomar su capa." (MT.24:17,18). Ellos deberán huir a toda prisa a las montañas. Toda esta instrucción es claramente para personas que estén viviendo en Judea. Los lectores de las Escrituras que persisten en ver la iglesia de Dios en este capitulo deben encontrarse ellos mismos asediados con dificultades en cada detalle de la profecía. ¿Esla iglesia de Dios limitada a una tierra para que tales señales sean de alguna utilidad? ¿No se encuentra más bien la iglesia de Dios en cada lugar de la tierra? Cuando percibimos que los piadosos en Judea están en vista, todo es simple y claro.
El Señor les manda que oren para que su huida no sea en invierno, o en día sábado. ¡Qué misericordioso es Él! Siempre pensando en las circunstancias de Sus amados santos, aunque estas sean triviales o pequeñas. ¡Él piensa del sufrimiento envuelto en una huida en invierno sin tiempo para ir a casa buscar una capa! ¡Y qué dilema para ellos mismos si la imagen fue puesta en el lugar santo un día sábado! Por tanto Él les manda clamar a Dios para que no ocurra así. En tal caso ellos no sabrían que hacer, si una jornada de alguna extensión debiese ser emprendida en día sábado (hech.1:12) esto envolvería un quebrantamiento de la ley; aun así, si ellos se demoraban un poco debido a su conciencia, podrían perder sus vidas.
La introducción del sábado es una prueba adicional que estamos sobre terreno judío, más bien que cristiano. En ninguna parte en las epístolas del N. Testamento es referido el sábado en conexión con la iglesia de Dios salvo en Col.2:16,17, donde el apóstol contiende por libertad en cuanto a este día. El día cristiano no es el séptimo día, sino el primero dela semana; que nos habla de una redención consumada, de victoria obtenida, y de una nueva creación donde todas las cosas son de Dios. Es serio confundir los dos días, aunque comúnmente se hace. Los principios conectados con ellos son completamente diferentes, y aun opuestos. El día sábado está suspendido durante el presente periodo de gracia, pero vendrá ala vista nuevamente ,entonces Dios reasumirá las relaciones con el pueblo de Israel.
Para volver. La tribulación será una sin paralelo. Satanás será justo entonces arrojado del cielo (para nunca más retornar a este), y estará lleno de ira, sabiendo que tiene poco tiempo (Apoc.12:7-13). Toda oposición a sus esquemas él tratará de borrarla por medio de sus principales herramientas, la bestia romana y el hombre de pecado. Aun así tendrá las riendas de todo. El enemigo no puede exceder sus límites. Él tiene el tiene establecido el momento cuando la aflicción cesará; pero por causa de los escogidos esos días serán acortados (v.22). Por tres años y medio la tribulación arderá. El periodo es descrito de varias maneras en las Escrituras, no dejando ninguna duda en el pensamiento. En Apoc.11:3; 12:6, leemos de "mil doscientos sesenta días;" en Apoc.11:11:2, de "cuarenta y dos meses;" y en Dn.7:25, de "tiempo, tiempos, y medio tiempo". También Dn.9:27 confirma esto.
Antes de hablar de libertad, el Señor da otra advertencia de un carácter. "Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis.
24:24 Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.
24:25 Ya os lo he dicho antes. 24:26 Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis. "(vv. 23-26). Esta palabra de consejo sin duda probará ser de gran valor en ese tiempo. Los fugitivos pueden ser fácilmente engañados. Cuando huyendo por sus vidas, clamando de sus agonizantes corazones, "oh Señor, ¿hasta cuándo? (Sal. 79:5; Isa. 64:1). Qué fácilmente podrían ellos sea engañados por falsos reportes. Supongamos que alguno les dijese que Cristo ha llegado, y que está en belén o en alguna otra parte, esto podría ser creído. Existe una gran diferencia en la esperanzas del cristiano y del judío en este respecto. Nuestra esperanza no es la venida del Señor a la tierra, sino a los aires. Allí nos encontraremos con Él, e iremos con Él a la casa del Padre. Esta es nuestra propia esperanza; pero para los judíos es distinto. Él vendrá a ellos donde ellos están, Sus pies primero tocarán el monte de los Olivos, el mismo lugar desde donde subió (Zac. 14:4; Hech. 1:9-12). Pero el punto de advertencia es que ellos no necesitan ser informados del momento cuando Él aparezca, porque Su manifestación será un despliegue público de gloria, comparable al relámpago que sale del oriente, y brilla hasta el occidente: "todo ojo le verá" (Apoc. 1:7)
Su venida pondrá fin a la gran tribulación. El justo Señor tratará con Sus adversarios, especialmente la bestia, y el hombre de pecado (como ya lo hemos mostrado), y libertará a Sus oprimidos y sufrientes santos. Este es el testimonio de Mt.24.
Ahora consideraremos el testimonio de los profetas del A. Testamento. Lea Jer. 30:30:4-9.El profeta evidentemente habla del mismo tiempo que el Señor Jesús en el capitulo que hemos estado examinando. "¡Ay! Porque grande es ese día, ninguno semejante a este" Este es el claramente bien conocido tiempo de inigualable tiempo de tribulación. ¿Pero quienes son los sufrientes contemplados? No la iglesia, dela cual jeremías sabía aun menos que los discípulos que se sentaban con el Señor sobre el monte de los Olivos. "Este es el tiempo de angustia para Jacob" "Estas son las palabras que Jehová habló concerniente a Israel y Judá". Todo esto es muy simple e inteligible, salvo para aquellos que son adictos al hábito de "espiritualizar" las profecías del A. Testamento. Tal modo de interpretación es un gran error, altamente dañino en muchos casos para el alma, que se encuentra a si misma apropiándose de bendiciones meramente terrenales, cuando Dios quiere que el corazón goce de la porción celestial, que Él nos ha dado en Cristo resucitado. Cuando Dios dice "Israel" y "Judá", podemos estar seguros que piensa en lo que dice. Entonces, la predicción de jeremías habla de tribulación para el pueblo terrenal, y no hay otros en su pensamiento. Pero libertad debe seguir, como Mt.24 nos ha mostrado. Jacob será salvo de su tribulación, el yugo de los opresores será roto para siempre, e Israel servirá a Jehová su Dios, y al verdadero David su rey.
Volvámonos ahora a Dn.12:1:" Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravillas, y prosperará, hasta que sea consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá.
11:37 Del Dios de sus padres no hará caso, ni del amor de las mujeres; ni respetará a dios alguno, porque sobre todo se engrandecerá.
11:38 Mas honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio.
11:39 Con un dios ajeno se hará de las fortalezas más inexpugnables, y colmará de honores a los que le reconozcan, y por precio repartirá la tierra.
11:40 Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará.
11:41 Entrará a la tierra gloriosa, y muchas provincias caerán; mas éstas escaparán de su mano: Edom y Moab, y la mayoría de los hijos de Amón.
11:42 Extenderá su mano contra las tierras, y no escapará el país de Egipto.
11:43 Y se apoderará de los tesoros de oro y plata, y de todas las cosas preciosas de Egipto; y los de Libia y de Etiopía le seguirán.
11:44 Pero noticias del oriente y del norte lo atemorizarán, y saldrá con gran ira para destruir y matar a muchos.
11:45 Y plantará las tiendas de su palacio entre los mares y el monte glorioso y santo; mas llegará a su fin, y no tendrá quien le ayude." (Dn. 11:45) Se verá que el ángel está hablando al profeta del día de la supremacía del anticristo en la tierra gloriosa (Israel), con esto está conectado "un tiempo de tribulación, tal como nunca lo ha habido desde que hubo nación," Este es el periodo familiar de la tribulación sin paralelo. ¿Pero quienes son los sufrientes? "Tu pueblo:" el pueblo de Daniel son los judíos, como no necesito detenerme para probarlo. La libertad sigue a la tribulación, al menos para los elegidos_ aquellos inscritos en el libro de Dios. Daniel, y el Señor Jesús escribieron en tiempos diferentes, y bajo circunstancias ampliamente diferentes, ellas corresponden exactamente en cada pequeño detalle. La mente reverente no puede fallar en ver en esto la mano guiadora de un Espíritu. Él fue quien inspiró a todos los escritores en el libro de Dios, dando unidad y armonía a todo. Pueda nuestra confianza en el Espíritu de Dios profundizarse en este día malo, cuando tanta incredulidad y duda existen a nuestro alrededor.
El próximo pasaje puede presentar mayores dificultades a algunos lectores de las Santas Escrituras; me refiero a Apoc.7:9-17. Allí leemos indudablemente de gentiles , lo que ha guiado a muchos a suponer que la iglesia de Dios es pensada por ello. Pero atención al lugar acordado al cap.7. El libro de Apocalipsis ayudará grandemente a resolver la dificultad. En Apoc.1 vemos siete candeleros, y al Hijo del hombre andando en medio de ellos; esto es preliminar. En Apoc. 2 y 3, en las epístolas a las siete iglesias en Asia, tenemos un bosquejo de la historia exterior dela iglesia sobre la tierra desde los días de los apóstoles hasta el fin. Después de esto no escuchamos nada más de iglesias excepto en Apoc.22:16. Apocalipsis 4 y 5, muestra al cielo preparándose para la obra de juicio, y a los santos celestiales bajo la figura de 24 ancianos coronados y entronizados, que son vistos en el hogar con el Señor antes de que los juicios comiencen. Esto es seguido por la apertura de los sellos (Apoc.6) y el derramamiento de la ira divina. Después tenemos apoc.7.Este es realmente un paréntesis, que viene entre los sellos sexto y séptimo. Este habla de misericordia en medio del juicio. El corazón de Dios ama la misericordia. El juicio es Su obra extraña. Él debe ejecutarlo en consistencia con la santidad de Su naturaleza, y en vista a mantener la majestad de Su trono, pero Él no se deleita en el juicio. Él tiene real delicia en bendecir y salvar al hombre, como lo muestra Lucas, Él nunca encuentra delicia en juzgarlos.
Apoc.7, entonces, es un paréntesis de misericordia. Los juicios son restringidos, mientras Dios pone a un lado el velo, para marcar a los Suyos. Primero encontramos a 144.000 sellados. Un número definido de todas las tribus de Israel en vista a ser preservados durante los terrores de los tiempos. ¿Pero es esto todo? No; también hay gentiles salvados. "Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos; y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén. Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido? Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. "(vv. 9-14)
Algunos dirán, "¡ciertamente estos son la iglesia de Dios!" Los tales harán bien en examinar de cerca los versículos. Observe, esta multitud vestida d e blanco con palmas en sus manos es completamente distinta a los ancianos, que, como ha hemos notado, representan a la iglesia, aunque no solo ala iglesia. Uno de los ancianos presenta la pregunta al apóstol en cuanto a esta incontable multitud, y después explica que ellos han salido de la gran tribulación. El artículo definido debiese insertarse en el v.14. Esto ayuda a una mejor comprensión de las palabras del anciano. Estas evidentemente son personas que han escuchado el evangelio del reino de parte de mensajeros judíos y creído en éste. Sufrimiento sigue para ellos, aunque no necesariamente la pérdida de la vida. Debe recordarse que las seducciones y tribulaciones de los últimos días serán muy ampliamente extendidas. Aunque muy severas en Judea, como es justo, estas se extenderán desde allí más o menos a toda la tierra civilizada. El hombre de pecado en la tierra, estará asociado con el líder del imperio romano reavivado, extenderá su veneno, con su consecuente sufrimiento y aflicción, por todas partes.
Pero esta multitud vestida de blanco, por gracia ha permanecido firme. Como Sadrac, Mesac, y Abed-nego, ellos se han negado a unirse a la idolatría universal. "ellos han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero." Ellos son ahora vistos victoriosos, a punto de entrar en la bendición. Los términos de sus bendiciones hablan de la tierra, mas bien que del cielo, las figuras son tomadas prestadas de Isa.49, "Ante el trono" es probablemente una expresión moral mas bien que local, como en Apoc. 14:3 (compare también Apoc.12:1).Su lugar y porción, no dudo, será en la tierra milenial bajo el apacible reino del Señor Jesús.
Unas pocas palabras en cuanto a Apoc.12 pueden ser útiles a algunos lectores. La gran tribulación no es referida allí por nombre, pero la alusión a través de todo es evidentemente a ese periodo. La mujer vestida con el sol es vista siendo perseguida por el dragón, pero siendo preservada por Dios, y alimentada en el desierto durante los mil doscientos sesenta días (Apoc.12:6-14). ¿Quién es la mujer? El v.5 es suficiente para responder a la pregunta. El Hijo varón es Cristo, esto está más allá de controversia, Cristo vino de Israel, como nos recuerda el apóstol en Rom. 9:5. El primer verso de nuestro capitulo nos muestra a Israel visto desde el punto de vista de Dios, investido con todos los símbolos de autoridad sobre la tierra. En los días finales, ella es el objeto de la enemistad de Satanás. Él moverá poderes contra ella, y hará todo lo que está en su poder para destruirla. Pero no tendrá éxito. Israel está designado por Dios para venir a ser supremo en la tierra; un remanente por tanto será preservado en misericordia a través de todos los horrores de las últimas escenas para este mismo fin. Su palabra para Sus probados será, "Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación." (Isa. 26:20). Él proveerá para ellos una Zoar, como lo hizo para Lot en días pasados (Gén.19)
Tenemos que considerar una escritura más_ Apoc. 3:10: "Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra."
Esta palabra es indudablemente para la iglesia. Esto es parte de las palabras del Señor a la iglesia en Filadelfia. ¡Pero qué diferente al lenguaje de este pasaje a los que hemos estado considerando! Aquí no encontramos consejos en cuanto a lo que hay que hacer en tiempos de prueba, tampoco alguna promesa de gracia preservadora, sino simplemente, "te guardaré de la hora." Existe ciertamente una vasta diferencia entre ser preservado a través de la tribulación, y ser mantenido aparte de ésta completamente. Enoc y Noé naturalmente vienen a nuestros pensamientos aquí. A uno se le habló del juicio venidero, pero él fue trasladado al cielo antes de que el juicio cayese; el otro de igual manera fue advertido de la ira venidera, pero, en lugar de ser quitado de la escena de juicio, fue preservado a través de ella en un refugio provisto para él y su familia por Dios. Enoc es un tipo de la iglesia de Dios, Noé es mas bien una figura del remanente piadoso de Israel.
"La hora de tentación (o prueba)" es un término más amplio para referirse a la "gran tribulación". La última, como hemos visto, solo es de tres años y medio de duración, y comienza a la mitad de la semana setenta de Daniel, cuando el falso Cristo cambie su actitud y demande para si adoración; la "hora de tentación" comienza cuando él aparece primeramente, y cubre, por tanto, toda la última semana profética, y posiblemente más. De todo esto la iglesia de Dios debe ser preservada. Nosotros esperamos la Estrella resplandeciente de la mañana. Antes de que los juicios de Dios desciendan, seremos quitados de esta mala escena, y estaremos seguros con Cristo en la casa del Padre arriba.
Mientras tanto Su palabra es para nosotros la palabra de Su paciencia. Él espera a la diestra del Padre arriba, y nosotros esperamos en el lugar de conflicto abajo, por ese mismo maravilloso evento, por el mismo bendito momento de gozo. ¡Pueda esto ser crecientemente una realidad para cada uno de nosotros, por causa de Su nombre!
"¡Cordero de Dios Tú pronto en gloria!
A esta triste tierra retornarás;
Todos tus enemigos temblarán ante Ti,
Todos los que ahora te desprecian se lamentarán.
Todos Tus santos entonces estarán contigo,
Contigo en Tu reino para reinar;
Tuya la alabanza, y Tuya la gloria,
¡Cordero de Dios, muerto por los pecadores!
W.W. FEREDAY
<
No hay comentarios:
Publicar un comentario